Sala de Prensa

La Federació de la Petita i Mitjana Empresa de Menorca, PIME Menorca ha analizado entre los empresarios turísticos la evolución de la facturación del mes de agosto en relación a la pasada temporada y en la última temporada prepandemia.

Como ocurrió en el mes de julio, algo más de la mitad de los empresarios aumentó su facturación respecto al mes de agosto de 2021, así como también respecto a la temporada 2.019.

Este mes de agosto han sido menos los empresarios que han reducido su facturación respecto a agosto de 2.021 que los que la redujeron en julio. El sector turístico ha tenido unos resultados acordes con la temporada alta habitual en Menorca.

El incremento de facturación de las empresas no se ha traducido en una mayor rentabilidad. Las empresas han seguido sufriendo los elevados incrementos de costes, de suministros y de productos, además de las dificultades con las que se han encontrado para cubrir plantillas que también ha provocado un incremento de costes fijos.  Tal y como ha manifestado en varias ocasiones PIME Menorca, la facturación de las empresas esta temporada ha sido elevada, pero no así la rentabilidad, de la que muchas empresas ya han indicado que está siendo mucho menor que otras temporadas.

Continúan los empresarios con la gran incertidumbre sobre los meses de septiembre y octubre, que podrían cerrar una buena temporada para todo el sector.

El sector turístico ha moderado las expectativas que tenía en julio sobre la evolución del final de temporada. El 32% de las empresas del sector opina que septiembre y octubre evolucionarán mejor que en 2.021, cuando en el mes de julio, manifestaba lo mismo el 34%.

Más significativo es el dato respecto a la perspectiva negativa de la temporada, cuando en el mes de julio, casi 24% de los empresarios manifestaba que su expectativa era peor, en agosto ha sido el 31% quien indica que tendrá un peor comportamiento en relación a 2.021.

Esta tendencia muestra la falta de seguridad en la demanda para estos meses para Menorca, la tendencia negativa en el consumo de las familias, el encarecimiento de la cesta de la compra, y los datos negativos de previsiones económicas de otoño, sin duda, suponen un freno para igualar el final de temporada pasado.