Sala de Prensa

La moratoria de cuatro años para las actividades turísticas bloquea una opción imprescindible para dinamizar la actividad económica y la rentabilidad de las fincas en Menorca. El campo para ser sostenible tiene que poderse sostener por sí solo.

Muchas son las entidades que en los últimos tiempos hablan de la sostenibilidad de Menorca, el campo de Menorca, la Reserva de la Biosfera, lo bonitas que son las paret seques o las barreres d’ullastre…. nada de esto sería posible sin las explotaciones agrarias, y su gran contribución al paisaje y el ecosistema. Simplemente, la Menorca que conocemos no existiría.

Cada vez es más difícil sostener las explotaciones agrarias, y el campo de Menorca está en una situación límite, conocida lamentablemente por toda la sociedad menorquina, agravada en el último año por la grave crisis del sector lácteo.

Bloquear la actividad turística en el campo de Menorca durante cuatro años es un auténtico error. No tiene ningún sentido prohibir por decreto cuando el suelo rústico ya dispone de una regulación muy intervencionista y limitadora en Menorca. Y que crea verdaderos quebraderos de cabeza a arquitectos, aparejadores, ingenieros agrónomos y juristas.

AGRAME presentó veintidós alegaciones al borrador del nuevo Plan Territorial Insular, de las cuales diversas de ellas iban dirigidas a la actividad turística. Lamentábamos que no se diera opción a los propietarios de viviendas en rústico, la posibilidad de alquilarlas para poder contribuir al costoso mantenimiento de estas fincas y así evitar, en definitiva, que acaban siendo vendidas o abandonadas.

Ahora ni alquiler turístico, ni agroturismos, ni hoteles rurales, ni agroestancias, … se excluye totalmente el suelo rústico de la posibilidad de complementar la actividad agrícola y ganadera con el turismo, negando a los propietarios, una vez más, la posibilidad de generar unas rentas económicas ligadas al turismo que representan un balón de oxígeno para contribuir a su pervivencia en una época donde las rentas agrarias, no son suficientes y en muchos casos totalmente deficitarias.

Vendemos una imagen de Menorca de la cual no podemos participar económicamente. Sólo nos quieren para las campañas publicitarias, pero para pedir opinión y conocer de primera mano cuales son las necesidades dels “llocs” se olvida la Conselleria de Turismo del Govern de les Illes Balears y el Consell Insular de Menorca que algo tendremos que opinar también en materia turística.

Se realizan grandes esfuerzos e inversiones para hacer las cosas bien hechas, pero estos hechos constatan que no se tiene en cuenta la opinión de los empresarios de explotaciones agrarias y los propietarios que son los que realmente conocen la realidad y trabajan en el campo y por el campo de Menorca.